Chuparse el dedo es un conducta habitual en los bebés durante su primer año de vida o en niños de corta edad. Sin emabrgo, cuando este hábito se prolonga durante mucho tiempo, puede provocar complicaciones en el niño a mediano y largo plazo.
Es por esto que recomendamos tomar acciones cuanto antes.
Existen 3 factores importantes que se tiene que tomar en cuenta, la
duración, el tiempo y la intensidad
con que el niño se chupa el dedo. Este diagnostico puede servir para poder determinar el plan de tratamiento que sea pertinente ya que este habito puede generar problemas a futuro en el niño a nivel dental, hueso o de lenguaje y se puede presentar de distintas maneras.
- Deformidad en las arcadas dentales y paladar.
- Modificar la posición de los dientes (mal oclusión).
- Interferir en su crecimiento normal.
- Alteraciones faciales.
- Alteraciones en el lenguaje.
Es importante estar al pendiente de la
salud bucal de los niños
, ya que en los primeros años de vida es cuando las personas forman o adquieren ciertos hábitos que estarán durante toda su vida.
Si usted considera que su hijo esta chupándose de manera excesiva su dedo, recomendamos acudir con un Odontopediatra que pueda asesorarle sobre cual es el tratamiento a seguir para poder eliminar el habito que ha adquirido su hijo(a).
