La mejor forma de saber si tu hijo(a) necesita brackets es mediante un diagnóstico realizado con base en estudios radiográficos, fotográficos y modelos en yeso de su boca. Sin embargo, si notas alguno de los siguientes puntos es muy probable que se requiera tratamiento de ortodoncia.
- Apiñamiento dental. Significa que existe una mala posición en la alineación de los dientes, es decir, los dientes no caben y se giran o salen en una posición no adecuada
- Pérdida prematura de dientes. Debido a que el espacio que queda va siendo ocupado por otras piezas esto provoca que los dientes contiguos se recorran para cerrar el espacio, pero llegan a ocupar un lugar que no les corresponde, impidiendo la correcta erupción de los dientes permanentes.
- Dificultad para masticar o morder.
- Problemas en la mandíbula o ruidos al moverla.
- Si los dientes no se juntan al morder.
- Dientes que no están en proporción con la cara.
Algunos de estos indicadores pueden ser señal, no solo de necesidad de tratamiento de ortodoncia, sino de posibles problemas como:
- Mayor susceptibilidad a los traumas. Los dientes salidos puede aumentar el riesgo de sufrir lesiones dentales.
- Hipersensibilidad dental. La mala posición de los dientes puede generar zonas de fricción y acelerar el desgaste del esmalte.
- Enfermedad periodontal y caries. Se generan zonas de difícil acceso, dificultando una correcta higiene dental. Al acumularse bacterias estas pueden causar caries, gingivitis y mal aliento.
- Problemas en la articulación temporomandibular. Una maloclusión puede provocar problemas artrósicos, masticatorios y dolores locales irradiados.
Si notas algunos de los síntomas anteriores en tu hijo (a) es momento de acudir con un especialista. Programa su siguiente visita al ortodoncista en Ortodental y protege su salud bucal. ¿Crees que es muy temprano para un tratamiento de ortodoncia? Te invitamos a leer nuestro artículo ¿Cuál es la edad adecuada para poner brackets en niños? y conoce mas al respecto.